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Este sector puede desglosarse en los sectores de contabilidad, impuestos y control.

La contabilidad, como campo de la administración de empresas, comprende el registro sistemático, el seguimiento y la condensación de los flujos de dinero y servicios que se producen en la empresa. La documentación de los flujos de dinero y mercancías en la empresa se realiza para personas ajenas a la misma. Para fines internos, los datos se recogen con fines de control y planificación.

Las principales tareas de control incluyen la provisión de material de datos para apoyar a la dirección y a otros gerentes de la empresa en la toma de decisiones. De este modo, el controlling cierra una brecha entre la contabilidad y la gestión.

Los impuestos son cargas de derecho público que los ciudadanos en Alemania pagan para cubrir sus necesidades financieras generales. Los derechos/deberes de los ciudadanos y las empresas son, por consiguiente, complejos. Los servicios en esta área incluyen, por ejemplo, consultores financieros y de inversión, asesores fiscales, etc., todos los cuales requieren cursos de estudio completos.